En
la creencia popular suele asociarse la tecnología a los productos más modernos
y sofisticados, tales como una computadora, un teléfono móvil o una nave
espacial. Sin embargo la actividad tecnológica ha nacido con el hombre.
Desde los albores de la humanidad, nuestros
antepasados han tenido que resolver problemas para lograr subsistir y para
mejorar su calidad de vida. La capacidad de razonar de nuestro cerebro, lo cual
nos diferencia fundamentalmente de los animales, nos ha permitido emplear los
elementos que se hallan en el medio ambiente para satisfacer nuestras
necesidades, desde las básicas como proveernos de alimento y agua y protegernos
de las inclemencias del tiempo hasta disponer de medios masivos de transporte,
comunicaciones y entretenimiento. Inclusive hemos comenzado a explorar otros
mundos y a indagar en nuestro pasado y en el origen mismo del universo. A este
proceso creativo que tiene por objeto satisfacer las necesidades y las demandas
de los seres humanos lo denominamos desarrollo tecnológico o bien, simplemente,
tecnología. El mayor hito tecnológico fue la invención del lenguaje, ya que ha
sido el factor determinante de nuestro progreso social.
¿Por qué estudiar Tecnología en la
escuela?
Porque en cada actividad cotidiana que
llevamos a cabo hacemos tecnología. Son ejemplos de esto preparar una comida,
diseñar y construir un edificio, resolver un problema matemático, organizar un
torneo de fútbol, brindar servicios de logística, administrar una empresa,
distribuir energía eléctrica en una población, hacer una escultura, componer
música o buscar la estrategia adecuada para preparar un examen.
La tecnología es un área
multidisciplinaria y, por tal motivo, resulta imprescindible contar con un
espacio que dé sentido al resto de las áreas de estudio como Matemática, Lengua
y Ciencias, entre otras. Un ámbito en el cual se pueda aplicar el conocimiento
adquirido para analizar, reflexionar, discutir, proponer y descubrir soluciones
a problemas planteados de complejidad creciente, de acuerdo a la madurez de los
niños.
¿Cómo implementar el área Tecnología en
la escuela?
A través de pequeños proyectos que requieren
desde el desarrollo de la motricidad fina, mediante técnicas de trabajo manual
(recortar, pegar, serruchar, clavar, etc.), hasta realizar procesos con un
mayor nivel de abstracción, como el diseño de sistemas mecánicos y de circuitos
eléctricos.
Sin lugar a dudas, involucrar a los niños en
este tipo de actividades les proporciona herramientas para comprender el mundo
actual y para tener una mente curiosa, flexible y abierta a los vertiginosos
cambios, característicos de la era del conocimiento que estamos viviendo.
Seguramente estarán mejor preparados para desempeñarse en sus futuros trabajos,
especialmente en aquellos que todavía no se han inventado.